Suelas para zapatos

Evolución de los Zapatos

Origen y significado de la palabra zapato

Se dice que la palabra zapato parece venir del árabe سباط (sabbat = cuero adobado). Por otro lado, hay quienes aseguran que etimológicamente procede del turco (bashkirio) «zabata» –  que significa zueco de corteza de tilo.   Las partes del zapato   Para abordar el tema, tendríamos que partir tanto de las siluetas de hombre como de las de mujer, ya que cada uno posee elementos especiales que cumplen funciones distintas, ambos teniendo una construcción diferente como se puede ver en las ilustraciones.

¿De qué están hechos los zapatos?

 

En la antigüedad, la materia prima del zapato era principalmente la paja y las láminas de hojas de palmera. Posteriormente, fue el cuero, las telas hechas de tejidos naturales como el algodón o el lino para las superficies y exteriores. Para las suelas también se utilizaba el cuero, el corcho y la madera.

 

En la actualidad, hay un sin fin de materiales desde los sintéticos hasta los naturales y orgánicos, incluyendo pieles creadas a base de plantas y pegamentos que son más amables con el medio ambiente.

 

Pero en realidad… ¿para qué sirven los zapatos

 

Con el paso del tiempo, los zapatos cumplieron diferentes funciones en los distintos períodos históricos. En la prehistoria, surgieron para proteger los pies. Después esta función evolucionó. Ya no sólo eran para mantener los pies fuera de peligro y el dolor.

 

El hombre prehistórico fue quien lo inventó hace aproximadamente 15 mil años. Todo comenzó con la sandalia. En Egipto se confeccionaban con paja trenzada o láminas de hojas de palmera. Eran exclusivos para los hombres y faraones. Su uso era ceremonial. En Mesopotamia, era un lujo pero con el tiempo dejó de serlo.

 

Evolución del calzado

 

En Grecia, se describen a los héroes calzando lujosas sandalias. En la antigua Persia, se imponía un calzado cómodo para mujeres y ancianos. Estos primeros zapatos se nombraron Persakai. Después siguieron los Borceguí, un zapato de casa que también se utilizaba para viajar (muy parecidos a los suecos de piso). Por otro lado, en el imperio romano se crearon una especie de botas lazadas llamadas endrómides.

 

En el siglo III las mujeres de alto poder adquisitivo de la antigua Roma, adornaban sus zapatos con perlas y piedras preciosas. El zapato rojo era exclusivo de las cortesanas hasta que el emperador Aureliano decidió llevarlos. Esto provocó que los sumos pontífices prefirieron usar babuchas. 

 

El zapato comenzó su larga evolución a finales del siglo IV y se consolidó en el mundo Bizantino. Tras la caída de Roma nacieron los zapatos cerrados y chinelas color marrón.